El sobresaliente de María
Aprobar una asignatura suele implicar mucho de esfuerzo y algo de suerte. Más esfuerzo y más suerte requiere alcanzar notas más elevadas. Sin embargo, esfuerzo y suerte van de la mano. Con la suerte, solamente, no se saca adelante casi nada, porque por mucho que nos caiga un examen sencillo, si no hay estudio detrás poco se puede hacer. Además, es falso que haya exámenes sencillos, pues si se preguntan cosas básicas el margen tolerable de error es mucho más bajo que si se plantean cuestiones más complejas. Por otra parte, el esfuerzo abre las puertas de la suerte, es decir, amplía las posibilidades de que nos sintamos afortunados con lo que se ha preguntado, por la sencilla razón de que habíamos comprado muchas papeletas a la luz del flexo. Vamos a centrarnos en el esfuerzo, entonces, que es la clave del éxito. Hay personas que parece que no se esfuerzan y sacan notas estupendas. Es mentira. Lo que ocurre es que a algunas personas no les cuesta trab